sábado, 6 de febrero de 2010

Invictus


Ayer me acerque a los cines Broadway en compañía de mis amigos Raúl y Miguel a ver el ultimo film del Sr Clint Eastwood. Una gran película y una gran historia sin duda.


Las expectativas que tenía antes de verla eran fundadas, otra vez el viejo Clint atrapándonos gracias a una historia contada de una forma muy personal, cercana y desde varias perspectivas; la historia de un líder que creyó en si mismo y en su voluntad para cambiar las cosas en un pais donde no cabía la convivencia de dos mundos muy diferentes.

Existen muchas lecciones de liderazgo en la película y ciertas escenas enseñan el porqué una persona puede no solo tener carisma sino ser una referencia para los demás. Clint nos muestra como Mandela supo acercar a esos dos mundos creando puentes y acercando los sentimientos desde un vinculo común, un objetivo común.

Se demuestra en esta película que el camino está en la cooperación y en la dedicación de todos los estamentos a enseñar a los más jóvenes, los caminos que nos llevarán a mejorar la convivencia, a comprometerse con la comunidad y a respetar lo más importante de aquellos que fueron nuestros más recientes enemigos, porqué desde el conocimiento de los demás, se pueden descubrir las debilidades y aproximarse mejor al acercamiento de dos visiones diferentes.

Si aún no la han visto, no duden en verla. Gracias amigos por haberme acompañado, fue antes, durante y a posteriori una velada muy interesante.


No hay comentarios:

Publicar un comentario