Solo los dioses tocan el cielo y solo los que se asemejan a ellos hacen cosas que el resto de los mortales no estamos capacitados a hacer por mucho entrenamiento, práctica y tesón que dediquemos a ello.
Ayer y a través de un MP2P vi el partido del Barcelona contra el Zaragoza, o lo que yo denominaría la tiranía del "Messi"as. También ayer me comentó un amigo asturiano del Sporting, pero que el resto del año vela armas por el RM, que Messi no jugaría por un problema odontológico, más concretamente por tener un flemón.
Lo que ayer vi, fue tremendo- Preámbulo: Un Sr bajito con mucha personalidad vestido con la malla azulgrana, de aspecto humilde con el 10 a la espalda, que a los 4 minutos aprovecha la primera que se le presenta, clava los dedos en el cielo y sonríe por primera vez.
Segundo acto: El Sr bajito se mete en el centro de los 3/4 de la cancha y ahí comienza a incordiar y presionar a la zaga, permitiendo una mejor conexión entre el y su medio campo y el larguirucho delantero centro que le acompaña. Me detengo aquí porque las comparaciones son odiosas: Uno alto y el otro bajito, uno lento y el otro muy rápido, uno hábil y el otro un genio de los malavares, uno que tuvo su día más negro el otro eclipso a los 21 jugadores restantes.
Este Sr y no es la primera que lo hace, en su afanado interés por manejar la pelota, le quita la bolita al mediocentro del Zaragoza y solo ve entre ceja y ceja el gol, maniobra, corre, conduce, quiebra, mira y bate al portero, lo mismo le da sortear a dos,tres o cuatro contrarios, el gol le endulza la tarde y vive para el y por el, como el amante que busca su doncella en las plácidas y calidad noches de verano. El gol que marco ayer, fue sublime, de crack, de estrella del fútbol, de dominio de todas las facetas, de jugador completo, bajito pero completo, del mejor.
Después de eso, los divos, "que no lo es", se dedicarían a taconear, a relajarse con lujos par la grada, pero el no, se propone visitar de nuevo a su querido amigo el gol y también a su compañero Milito, segunda parada:
Seguramente Leo es quién mejor entiende a su compatriota al haber compartido el pasado año la dureza de una lesión que le tuvo apartado todo el año pasado de los terrenos de juego, el año en que lo ganaron todo. Su particular apuesta solo la conocen ellos, pero algo se traman estos dos, pues cada vez que dobla o hace un triplete se acerca a saludarlo y se sube en sus regazos.
Pues eso que después de que su compañero "El grandullón" fallo otros dos, él se empeño en marcar un tercero, como sabiendo que a esto del fútbol no vale con dos, ni con tres, ¡Cuantos más mejor!. Ahí esta que si no es por este tercero pierden el partido.
Entreacto: Cuando peor se habían puesto las cosas, saco su varita de nuevo y se interno en el área, con unos cuantos contorneos y descarados regates, hasta que le hicieron penalty. En vez de tirarlo él se lo dio al grandullón, para que sanara la herida que tenía con el gol, ¡que más se puede pedir!: Líder, amigo, compañero, genio, infatigable, luchador y soñador...
¿Mejor jugador del mundo? No se hagan la pregunta, disfruten de él, de lo que ha hecho hasta hoy, de lo que hizo ayer, y de lo que hará proximanente, a mi me tiene ganado como admirador para toda la vida.
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