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Aprovecharé mi blog para comunicaros que estoy en forma, que me he planteado dejar los dos
kilos o más que se me iban a acumular en los michelines y que gracias a la práctica del deporte
más saludable que hay, se han disipado en sudor y gases.
Para demostrar lo de la forma os dejo estas dos capturas del programa Endomondo:
a casa por el paseo que rodea laguna sur-oeste.
Como veis en la segunda imagen, se puede ir andando verdaderamente rápido y en cadencia constante. Tengo que decir que desde que empecé a andar con cierta asiduidad los ritmos han aumentado de 6,5 Km/h a 7 en los primeros 15 días, de 7 a 7,3 Km/h en el mes siguiente y en los últimos 6 meses he pasado a desarrollar una cadencia de 8,1 u 8,2 Km/h sobre un recorrido base de 8, 12 o 18 Km por sesión.
Gracias a Endomondo y el GPS del móvil controlas tu actividad y el desarrollo de tus caminatas sirviéndote
de acicate para la mejora.
Sin gimnasios que nos cuestan un pico, sin golpes, caídas o roturas derivados de nuestros menores reflejos en actividades de deporte colectivo o en contacto con el adversario, sin un gran desgaste, ya que al andar ejercitamos muchos músculos (no tantos como en la natación) y no los extralimitamos como al correr en el caso de rodillas,tobillos, caderas y espalda.
Para el que crea que quizás este obsesionado por ir rápido le diré que no lo hago por vicio, sino porque si no vas rápido no quemas por muy saludable que sea andar, esta demostrado:
El caminar es una de las formas más fáciles y baratas de mantener nuestra salud.
Treinta minutos de caminata a paso vivo cada día pueden realmente mejorar la salud cardiaca, según los expertos.
En estudios recientes se cogieron a 500 hombres y mujeres sedentarios entre los 30 y 69 años de edad y se encontró que caminar durante 30 minutos, cinco o más días a la semana, a una intensidad moderada o fuerte, o caminar con una intensidad fuerte tres a cuatro veces a la semana, llevó a significativas mejoras a largo plazo en la buena forma cardiorrespiratoria.
Caminar frecuentemente a paso vivo brindó los mayores beneficios en la buena forma además de mejoras moderadas a corto plazo en los niveles de colesterol, según estos estudios.
Pero tampoco deberíamos de llevar a engaño. Con el andar por sí solo poco haríamos. Hay que combinarlo con otras cosas.
Y repetimos, andar a baja intensidad no nos llevará a mejorar nuestra condición física. Es con el trabajo a media-alta y alta intensidad la que nos provocará buenos beneficios (aunque sea un período corto de tiempo.)
Todo esto es cierto: En mi caso he pasado de una Tensión arterial de 9-13,5 a otra de 8-12 ( La más compensada), de 98,8 a 86,3 Kg, de tener colesterol medio alto a uno regulado y fundamentalmente de
sentirme mucho más joven, ágil y saludable aunque los años van cayendo.
¡Hasta la próxima!
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